sábado, 12 de diciembre de 2009

Desequilibrio Natural...

"Noche embriagante"
Despierto a causa de una terrible inundación de recuerdos. Me duele la cabeza de tan sólo recordarla. Volteo, miro. Vacío. Vacío el cálido nido que nos acogió varias ocasiones en las cuales, le susurré tantas veces que la amaba y que era mía, sólo mía. Sin duda alguna, revivir eso era más que suficiente para cortarme la piel, la voz en fragmentos muertos…

Muero. Muero al pensar que tantas cosas fueron en vano.
¿Cómo podría ella pensar así? No lo sé. Creí conocerla. Creí siempre saber que le ocurría, qué pensaba.
¿Será posible? ¡Por Dios! Es la pesadilla más nítida y transparente que vivo y siempre fue presente: mi temor a olvidarla.
Sin embargo, me detenía a cada instante preguntando más y más. Llovían mil ideas de mi cabeza al corazón, luego, a los pies.
¿Será que nunca fuiste suficiente para ella? Me preguntaba el espejo, acompañándolo detrás una terrible alucinación: ¿acaso alguien más llenó un vacío aparentemente inexistente?

¿Por qué? ¿Por qué a mí? ¿Qué hice para vivir esto? ¿Qué no hice para todo esto?

Después de tantas vueltas me decido a hablarle.
(Suena el teléfono)

- ¿Bueno?
- Hola Lorena.
- Hola. ¿Cómo estás?
- ¿Tú cómo estás?
- De maravilla. ¿Sabes algo? Yo no te escucho bien.
- Lo normal.
- Bueno. ¿Qué quieres?
- ¿Tienes el día libre?
- Claro. ¿Quieres salir?
- Quiero verte.
- Nos vemos donde siempre en una hora. ¿Estamos?
- Nos vemos ahí. Te amo.
- Ya no habíamos hablado. No sigas, por favor. Adiós.


Me armonizó esa llamada. Su tan dulce manera cortante de hablar por teléfono. Así era ella.
Aunque muchas personas alegaban que Lorena era una persona especial y voluble (cosa bastante cierta), ante mí seguía siendo aquella mujer, la más hermosa que he tenido.
Y que esa terrible mañana de confusión me arrebató del cuerpo.

Iba camino hacia ese pequeño parque que fue testigo de nuestra relación. Fue testigo también de aquél atardecer en el que le pedí que fuera mía y, compasiva, deslizó una cálida luz que pronto se fue convirtiendo en humedad. El cielo derramó toda esa felicidad y pasión que se juntó en ese momento.
Llegué antes que ella. Siempre odie hacerla esperar. Prefería yo llegar antes, me gusta verla aparecer con la sonrisa que me había cautivado desde hace tiempo.
Una vez más la vi llegar, tan hermosa como siempre ha sido para mí. Esta vez, la expresión de su rostro era diferente. Era bastante claro ver que nuestro encuentro era preocupante para ella (reconfortante para mí), después de dejarme y olvidarme dos infinitos meses.


- Hola, pequeña.
- Hola.
(Después de todo, ni siquiera me hablaba por mi nombre) ¿Cómo has estado?
- ¿Cómo quieres que me encuentre? Dímelo tú.
- La verdad es que no lo sé, por esa razón es por la que pregunto.
- Tu ironía. Siempre me pareció encantadora.
- ¿Vienes a hablar de mi carácter?
- No, he venido porque necesitaba verte. Sabes que te extraño, no te hagas la desentendida.
- Por eso me fui todo este tiempo. Para que te olvidaras de mí. Para que dejaras de amarme. Todo esto está mal, no puede ser y lo sabes. Deja de fingir que nunca hablamos de esto.
- Yo sé que estás confundida. Toda esa confusión y las palabras desviaron tu sentir, nuestros sueños.
- Me abrieron los ojos.
- ¡Te los cubrieron! Por favor, date cuenta...

Nuestra "discusión" duró más de una hora, terminando en un silencio profundo que por fin ella asesinó.

- Debo irme. Renatta se ha puesto muy mal. Cuídate mucho por favor, ¿sí?
- Tú también cuídate mucho Lorena.
- No me llames así.
- Sabes de memoria que me encanta tu nombre. Por favor, si necesitas algo, quiero saberlo.
- Llamaré. Adiós.


Se paró y caminó. Antes de dar el quinto paso la alcancé, tomé su mano y pregunté si podía verla de nuevo. Sólo contestó que llamaría después.

Pasaron tres días en los que volví a perderla de mi camino. Al atardecer de ese tercer día me llamó, diciendo que todo había salido bien y que su hermana estaba mejor. A petición de Renatta, platiqué con ella durante mucho tiempo. A pesar de no ser tan paciente con los niños, ella me parecía una niña encantadora, despierta e inteligente. Bella. Idéntica a Lorena de niña.
Después de despedirme de ella me despedí de Lorena lo más breve posible, colgando rápido.
Por alguna extraña razón no quería saber si tenía ganas de verme o no. Aún me dolían sus palabras. -Es verdad, tal vez necesito olvidarla. Pero la amo...- ¡LA AMO!
Me encontré gritando, siendo interrumpido aquél relajo por un profundo suspiro.


La semana que se venía era intensa, pero la necesaria y suficiente para despejarme. No quería, todavía me dolía tener que aceptar sus palabras, su fría decisión. Pero no podía hacer a un lado las cosas cotidianas.
El último día de esa semana fue fatal: en resumidas cuentas, fue un caos y, lo que me hizo estallar fue ver a Lorena en la misma avenida por la que yo transitaba.


- Hola Lorena. Buenas tardes.
- Hola. ¿Por qué por aquí?
- Tuve un pésimo día y nada que hacer por ahora.
- No te ves bien ¿Qué pasa?
- Nada que quieras saber. No quiero que te metas, ni tampoco preocuparte. Debo seguir. Adiós, cuídate.

Me fui, sin mirar a atrás. Llegando a casa no pude evitar el llorar de manera desesperada. Jamás le había hablado así a Lorena. Me sentía la persona más estúpida, miserable y culpable, hasta que me perdí en los brazos de Morfeo.

A la tarde del día siguiente sonó el teléfono y, para mi sorpresa era Renatta, contándome que su hermana se la pasó llorando toda la tarde en su recámara (en efecto, la hice sentir mal) y que había salido temprano, que si yo la llegaba a encontrar, la cuidara. Colgamos.

Me alisté y salí. ¿Dónde podría estar? Sólo se me ocurrió un posible lugar: aquél parque simplón en el que hablamos la primera y la última vez que nos vimos. Llegando a éste la encontré en una banca, sentada, sollozando silenciosamente. Me acerqué a ella y me senté. Cuando sintió mi presencia se exaltó, no me había escuchado. La tomé de sus hermosas manos llenas de pecas.


- Perdóname Lorena. Ayer te hablé de la manera más incorrecta. Todo estaba mal y tu no eres la culpable de eso.
- No me importa como me hablaste. Estoy desesperada. No puedo seguir sin ti. No puedo seguir intentando sobrevivir sin ti. Ya no puedo. Es tan vacío, tan incoherente. No hay alguien más en mi vida y no lo habrá, si no eres tú. Prefiero dejarme morir.


La tomé entré mis brazos y la besé.

- Te amo Lorena. No sabes cuanto te extrañé todo este tiempo.
- Yo también te amo. Perdóname por todo el daño que te he hecho. No merezco estar contigo, pero no puedo continuar mi vida sin ti. Te amo, por aceptar mis defectos, indecisiones y errores. Por ser tú. Te amo. Te amo Denisse. Y quiero estar contigo, eternamente...


8 comentarios:

  1. Realmente hermoso, muy bonito la neta un historia de amor típica pero con sentimiento y nostalgía, bastante bonito, n oesperaba menos de tí. :)

    ResponderEliminar
  2. Muy conmovedora, muy muy padre, me gustó mucho. Ya te dije, tienes aliento de novelista, haz el intento :)

    un abrazo

    ResponderEliminar
  3. tsssssssssas
    ajajaja(llorido de chapo)
    esta bn padreee tereee
    ajajaja si no fuera un macho creo
    que llorariaaa ehhhh
    ajajaja esta bn bonita la historia tere
    bueno espero que sigas
    escribiendo por que cada vez lo hases mejor
    si escribes un libro o algo asi algun
    dia creeme que sere de tus primeros clientes
    bueno tere nos vemosss tkmmmm bye byeeeeeee

    ResponderEliminar
  4. coincidiria con addi con la idea de que es una tipica historia de amor.. pero no lo ess
    ...
    por que son lesbianas!
    muy bonita historia tere
    congratulations!
    jeje

    ResponderEliminar
  5. orales
    rebn haha
    que bonito texto
    awebo! sigue asi tere que va chidooo :)
    felicidades (:

    ResponderEliminar
  6. TERE...
    nena... esta super bna tu mini novela..!
    esta muii romantica y el hecho de ke sean lesbianas le da un toque mas interesante..
    espero ke sigas haciendo cosas asi... por ke si me latio..!!
    ademas esta bn chido chÖby...
    recuerda ke te quiero♥

    ResponderEliminar
  7. baaaaaarbaro!!!que mas puedo decir!! esta super!!
    tan tan super de verdad!!!
    hasta me dieron ganas de cambiarme de lado!! jaja..
    ntc!!
    pero en realidad..es muy muy bello!!
    y como te dije hace un minuto por msn!
    BEST SELLERS!!
    ES AUTENTICO!!!
    sigue con eso...y seras la bomba!!!
    te quiero!!
    lau!!

    ResponderEliminar
  8. si alguien se interesara en contar mi historia, estoy segura que nadie lo haría mejor que tú...jajaja...
    gracias por dejarnos soñar y mostrarnos un mundo donde todo es posible...
    Denisse Velázquez

    ResponderEliminar

Aclaraciones, dudas, comentarios..?? AQUÍ! (: